Muy felices fiestas a todos 🙂

Aprovecho la ocasión para desearos a todos unas fiestas llenas de todo lo que queráis.

Para algunos, son las primeras sin alguien especial, y si cabe las hace incluso más especiales. Yo las afronto no con miedo, pero si diría que de día en día.

No sé como serán, pero intuyo que serán días emotivos, acordándome más de mi padre que de costumbre, pero también sé que serán días de fiesta rodeada de mi familia, con mis sobrinas que todavía viven la magia de la Navidad con la inocencia que tienen los niños, con largas sobremesas y mucha música y cánticos… así que procuraré vivir las dos partes.

Me cojo unos días de fiesta en el trabajo, y muchos de vosotros es posible que también, así que aprovechemos para apreciar todo lo bueno que tenemos alrededor que tan por hecho damos a veces. Somos privilegiados, y aunque sé que no lo tenemos TODO, tenemos MUCHO.

Ayer me acordé de algo importante: durante una época solía decir que «no me podía quejar» cuando me preguntaban que qué tal estaba. La verdad es que tenemos toda la libertad y el derecho para quejarnos… ¿quién nos lo impide? la cuestión no es si «podemos», sino si «elegimos» quejarnos 🙂 

Ahí os dejo con eso… con elegir no quejarnos por la gran suerte que tenemos 🙂

Un abrazo enorme para todos, en especial para todos aquellos que más lo necesitan en estas fiestas 🙂 y como siempre, de corazón a corazón

Ana