¿Os acordáis de la historia de Iker?

Si en su día no la leistes, os aconsejo que lo hagáis ahora mismo. Fue exactamente hace un año cuando empezamos a recorrer este camino tan bonito sus padres, Ana y Sergio, Iker y yo.

Aquí tenéis el link para la historia entera 🙂

El caso es que las buenas noticias son que seguimos en este proceso. Al principio nadie apostaba porque todo esto pudiera salir adelante pero Iker, todo un campéon, está demostrando que puede con todo esto.

La semana pasada de hecho me contaron las buenas noticias: la resonancia sigue sin mostrar rastros del tumor.

Ha sido un camino largo con cirugías, quimioterapia y ni me puedo imaginar el sufrimiento que todo esto ha generado en los padres y abuelos de Iker, pero como todo camino, viene con altos y bajos, y de alguna manera se están centrando en lo que sí va bien, o al menos lo intentan.

Esta mañana he recibido un whatsapp de Ana, la madre de Iker. Ahora están en Madrid haciendo más pruebas y buscando soluciones a problemas que han seguido surgiendo, y como es normal, los padres están nerviosos.

Comparto la conversación entre Ana y yo porque creo que nos puede servir como recordatorio a todos en esos momentos llenos de incertidumbre y de dolor.

Ana:

• Hola Ana. Esta tarde ingresamos y mañana nos hacen una broncoscopia. Estoy nerviosilla

Yo:

• ayyy tranquila Ana… es un paso más. Se que no vas a estar tranquila porque yo te lo diga, pero mírale a Iker y aprecia todo lo que ha hecho hasta ahora… ¡¡Un campeón!!. No podemos controlar lo que pasa pero sí como lo vemos nosotros, ¿no? Cuanto más te centres en todo lo que ha ido bien a pesar de todos los problemas, más tranquila estarás. Y mañana, saldrá lo que salga y lidiaremos con eso, ¿te parece? Hoy solo a apreciar lo que SI sabemos que ha ido bien. Aquí me tienes… y por la tarde en la consulta si quieres.

Ana:

• Visto así parece “más fácil”. Un beso

Yo:

• Bieeeeen

¿Qué os parece? Qué cerca tenemos todos la posibilidad de sentirnos un poco mejor y no dejarnos llevar por el miedo, la incertidumbre y nuestra bendita cabeza que se pone a pensar en mil opciones de lo que pueda pasar en un futuro. Somos animales de hábitos, y a pesar de que no nos aporta absolutamente nada darle vueltas a la cabeza, caemos todos.

Creo firmemente que atraemos aquello donde ponemos la atención, y si es así, resulta realmente importante pensar en lo que sí queremos, y no en lo que no queremos.

De la misma manera que si entramos en una habitación oscura no pensamos en la oscuridad sino que encendemos la luz, es nuestra libertad cambiar la perspectiva de las cosas que nos pasan y sobre todo, ser conscientes de donde estamos poniendo la atención.

Teniendo en cuenta que da igual que seamos positivos o negativos con respecto al futuro, porque realmente no tenemos ni idea de lo que va a pasar, ¿no parece más lógico pensar en lo que Sí va bien y por lo menos no amargarnos el momento presente? Además, si nuestras acciones y creatividad van a tener algún efecto positivo en el futuro, este simple acto de centrarnos en lo que Sí va bien nos va a ayudar a buscar soluciones y pasar a la acción de una manera mucho más eficaz, creativa y conectada. No solo nos va a evitar el momento malo de darle vueltas y vueltas sino que va a impedir que caigamos en el victimismo, en enredarnos en todo lo que va mal y vamos a evitar esos momentos de bajón que muchas veces nos generamos nosotros mismos.

Esto es simple y realmente sencillo, pero no resulta fácil. Como decía antes, somos una especie atada a nuestros hábitos y cambiarlos requiere fuerza, presencia, consciencia y un poco de ganas.

Ánimo a todos y como siempre, gracias por estar ahí. Entre todos no tengo ni duda de que haremos de este mundo un sitio mejor. Poquito a poco, de persona en persona y pasito a pasito.